El sábado 11
de julio todos los caminos condujeron a Nueve de Julio. La iglesia diocesana de
Santo Domingo de Guzmán recibió con el corazón y los brazos abiertos de par en
par, a quien es hoy el nuevo obispo coadjutor y futuro pastor de la diócesis,
monseñor Ariel Torrado Mosconi. Mucho antes de la hora fijada para el inicio de
la celebración litúrgica, la Catedral se encontraba colmada de fieles venidos,
no solo de las comunidades de la diócesis, sino también de Santiago del Espero,
de donde proviene el obispo Ariel, luego de haber calado muy hondo en el
corazón de todos los santiagueños.
En los
primeros bancos se encontraban los intendentes de Nueve de Julio, de Lincoln y
de Carlos Casares. Otra nota descollante fue la presencia de 14 obispos
llegados de lugares tan distantes como Río Gallegos, Chaco, Tucumán, Santiago
del Estero y Mendoza, entre otras diócesis. También se hizo presente para dar lectura
al escrito de designación, por parte del Papa Francisco, de Monseñor Ariel
torrado como obispo coadjutor de Nueve de Julio, el nuncio apostólico Monseñor
Emil Paul Tscherrig.
Durante la
homilía de la Santa Misa, presidida por Monseñor Martín de Elizalde, el actual
pastor diocesano manifestó entre otros conceptos: "Agradezco al Papa la
designación de Monseñor Ariel Torrado Mosconi como Obispo Coadjutor con derecho
de sucesión, y junto con la comunidad diocesana lo recibimos con mucha alegría,
con la esperanza de seguir progresando en el camino que nos traza el Evangelio
y el deseo de enriquecernos con sus dones y aptitudes, con su generosidad apostólica
y su ciencia, con su ejemplo y su cercanía".
Luego de la
distribución de la comunión, fue el turno del flamante obispo coadjutor, que
dirigió su primer mensaje en persona al pueblo. Con un lenguaje cordial,
cercano, ameno, cautivó a todos y confirmó, en pocos minutos, que la iglesia
diocesana se encuentra ante un verdadero regalo de Dios. Monseñor Ariel, además
de varias expresiones de todo intimista, señaló la vocación misionera que desea
imprimir a su servicio en la iglesia particular nuevejuliense: " Seré un
pastor peregrino que irá a buscar al que está más lejos; procuro una Iglesia de
puertas abiertas para que ingresen todos’"
Con
posterioridad al acto litúrgico, la fiesta continuó en el gimnasio del colegio
"San Agustín". Allí se sirvió un chocolate mientras monseñor Ariel
fue "sometido" a múltiples saludos, pedidos de "selfies" y
bendiciones, por un largo espacio de tiempo.