NOTICIAS DE BUNGE: Por la buena senda

Fútbol Club Bunge empató en su cancha con Atlético Villegas y pudo llevarse la victoria.

Formación inicial de Fútbol Club: Arriba: Esteban Gómez; Jonás Reyes; Gastón Alvarez; José L. Sánchez; Mauro Roigé y Sebastián Nolasco. Abajo: Facundo Waiman; Juan Manuel Cháves; Sergio Nievas; Ramiro García y Agustín Fernández.

Muy linda tarde de otoño la del domingo 7 de abril, para ver fútbol en el “11 de Mayo”. Se enfrentaban el local, que venía de conseguir su primera victoria en el torneo “Apertura” de visitante ante Sarmiento en Ameghino y el empinado Atlético Villegas, quien llegaba a este compromiso, luego de derrotar a sus clásicos rivales, Eclipse y Sportivo en forma consecutiva.

Antes de echar a rodar la pelota, se guardó un minuto de silencio en homenaje a Enrique Carletti fallecido en la víspera, padre de Ezequiel, quien estuvo a cargo de los planteles de Fútbol Club, durante varias temporadas

El primer tiempo fue parejo, aunque de nivel discreto; poco juego asociado y mucha pelota aérea, deslucían el trámite; el local no podía controlar la zona media, donde Mauro Roigé no tenía compañía en la contención. Atlético se acercaba al área rival a través principalmente del movedizo Larrea aunque entre José Luis Sánchez y reyes se las arreglaron para controlar los embates visitantes. Sin embargo los dirigidos por Jorge Mina, arrimaron peligro luego de una buena combinación entre Nolasco y Juan Manuel Cháves. Será justamente este jugador que a los 15’ recoge un rebote el arquero Francucci, luego de un disparo de Sergio Nievas y pone en ventaja a “El Tambero”. Minutos más tarde “La Academia” llegaría al empate, cuando el juez sanciona un dudoso penal, por supuesta mano a Gastón Álvarez Hernández. De la pena máxima se encargó Nicolás Díaz con un disparo a la izquierda de Gómez, igualando las acciones. Faltando poco para finalizar el primer tiempo, Jonás Reyes sufrió un duro golpe en su cabeza, por lo que tuvo que ser retirado del campo y ya no retornaría en el complemento.

Para jugar el segundo tiempo, Gabriel Gielis reemplazo a Jonás Reyes y Mauro Rogie pasó a la última línea. Fútbol Club fue consolidando su juego con el correr de los minutos, bien plantado en el fondo, con un Facundo Waiman mucho más activo que en la primera mitad, el despliegue generoso de Sergio Nievas y la magia de “Tito” Chaves, que cada vez que encaraba, provocaba el tembladeral en las líneas enemigas. Probó suerte de media distancia Sebastián Nolasco. A los 18’ cuando Juan Manuel Chávez se iba al gol ingresando al área es interceptado, en un claro penal que el árbitro no sancionó. Sobre los 30’ un borbollón en el área visitante, por una pelota que llegó de la derecha, no pudo ser interceptada de lleno por Nolasco primero y por Chaves después, en lo que fue otra clara chance para Bunge. Iban 22’ cuando Jorge Mina ordenó el ingreso de Jesús Reyes por García. Casi al mismo tiempo, se iría Roigé lesionado, siendo reemplazado por Octavio Marengo. Poco después, agotados los cambios, Agustín Fernández que venía cumpliendo muy buen desempeño, controlando el sector izquierdo del ataque de Atlético, tuvo que abandonar el campo de juego por un duro golpe en una de sus piernas.

Atlético tuvo dos aproximaciones sobre el arco de Futbol Club, una de ellas magistralmente interceptada por Gómez y otra desperdiciada por el delantero, que elevo el remate sobre el travesaño con el arco a su disposición.

Llegó el final donde ambos se fueron conformes aunque, por lo realizado en el complemento, entendemos que el triunfo de Bunge, al encuentro le hubiera quedado bien.

Esta experiencia de Futbol Club, optando en la presente temporada por jugar con elementos locales y sumando a jugadores de Coronel Charlone, sin dudas que antes de lo esperado, está dando sus frutos. Con el correr de los partidos podrán afianzarse las líneas ante el mayor conocimiento y acople de los jugadores, pero hay dos elementos que a cuatro fechas recién de iniciado el torneo, explican este comienzo tan promisorio: Compromiso y Personalidad. No es un dato menor también, el acompañamiento afectuoso del público, premiando con el aplauso toda acción que implicaba un peligro de gol o una intervención feliz de los pibes.

Está claro y es una idea que hemos defendido siempre, que este es el camino. En los pueblos chicos no siempre hemos entendido que el futbol es una herramienta de inclusión y educación extraordinaria para nuestros jóvenes. Esto solo puede cumplirse si les alimenta la expectativa de ser tenidos en cuenta. Está claro que a todos nos gusta ganar; se juega para ganar, no solo para participar, pero afirmo que, con nuestros chicos, las derrotas duelen menos y los triunfos tienen un sabor incomparable.