Se llevó a cabo la edición 2011 del encuentro diocesano de jóvenes en General Villegas el sábado 14 de mayo. El lema para este año fue: "Para que en El tengan Vida" y a la cita acudieron alrededor de cuatrocientos adolescentes y jóvenes de distintos puntos de nuestra diócesis, entre ellos unos cincuenta de la Parroquia San Juan Nepomuceno representada por las localidades de Piedritas, Santa Regina, Coronel Charlone y Bunge.
Dio la bienvenida el padre Mariano Cortéz, director diocesano de pastoral juvenil. Después de un hermoso video sobre el papa Juan Pablo II, recientemente beatificado, el Intendente Gilberto Alegre se dirigió a los presentes en nombre de la ciudad anfitriona. La jornada continuó con encuentros grupales, la puesta en escena de un Vía Crucis en el que participaron una agrupación de teatro de General Villegas conjuntamente con el grupo de jóvenes de Lincoln , el que caló hondo en el corazón de los presentes. A su finalización se marchó por las calles de la ciudad hasta el templo parroquial donde se vivió la Eucaristía. A la salida de la misma se entregaron a los jóvenes mas de 350 rosarios que fueron hecho artesanalmente por un matrimonio de Lincoln y sus hijos especialmente para esta ocasión. Acompañados por los coordinadores, cada grupo se dirigió a un punto predeteerminado para rezar el Santo Rosario en la esquina del bario previo aviso a los vecinos. Finalizó el encuentro un momento de adoración Eucarística. Durante toda la jornada animó musicalmente el encuentro el grupo "Filocalia" de la ciudad de La Plata que tiene una amplia trayectoria no solo como banda de música sino poniendo en escena obras de carácter religioso. Este grupo concentra a muchos jóvenes del interior provincial que residen en La Plata por sus estudios y encuentran de este modo, un espacio de contención y de crecimiento en la Fe.
La comunidad parroquial y el grupo scouts se brindó durante todo el tiempo a los asistentes sirviendo mate cocido y alimentos y proveyendo a todas las necesidades de los visitantes. Otro aspecto positivo fue la larga cola de jóvenes y adultos para confesarse durante el transcurso de la Misa la que, aún después de finalizada la misma, encontraba ocupados a los sacerdotes encargados de administrar el Sacramento.
Una nota muy especial la brindó el padre Liborio Pérez, actual cura párroco de San Martín de Porres en Bragado el cual, con sus 84 años, visitó todos los grupos que se armaron durante el encuentro, les dejó su palabra y, durante la Santa Misa recibió una verdadera ovación cuando el padre Mariano lo mencionó en la homilía. Se trata de un cura muy querido y que tiene como imán para atraer los jóvenes simplemente su vida de Santidad. Una muestra cabal de que no hace falta mucho más para hacer gustar a las nuevas generaciones de lo que significa el amor de Cristo: cercanía, calidez y acompañamiento.
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